viernes, junio 01, 2007

Amanecer de risa y amor infantil

Me desperté y tenía dos cosas en la cabeza. La primera era mi risa. Todo porque soñé con algo así como una película. Yo era el protagonista de una escena que era un poco una mezcla de película española absurda con las italianas de Fellini. Era todo muy cómico, tanto que me desperté riendo. Espero escribir bien esa historia en la medida en que la vaya recordando.
La otra cosa es que súbitamente recordé una de las canciones que nos enseñaban en el colegio... en mi colegio episcopal de Valparaíso donde el amor de Dios era lo más importante. Entonces me enseñaban canciones como la que sigue:

Amar es entregarse
olvidándose de sí
buscando lo que a otros
pueda hacerle feliz
buscando lo que a otros
pueda hacerle feliz

que lindo es vivir para amar
que grande es tener para dar
dar alegría y felicidad
darse uno mismo eso es amar
dar alegría y felicidad
darse uno mismo eso es amor


Curiosisimo no? Mientras la cantaba, entre que sentía el pudor, lo patético de cantar algo así ahora, era inevitable reconocer de dónde venían mi profunda forma de pensar sobre el amor. Es una buen forma de evangelizar, dirán algunos, o un buen lavado de cerebro dirán otros, pero lo cierto es que termino creyendo en eso. Es peligroso en el mundo de hoy, querer de esa manera, pero el hecho de que el amor de hoy esté abusado y desmentido no quiere decir que el amor en realidad deba ser así.

3 comentarios:

katzenax dijo...

ya me ha pasado ante... es algo extraño, comico y normal jeje

chau cuidese

Anónimo dijo...

¿Y no será que el amor es un tremendo acto de egoísmo?

Saludos.

Anónimo dijo...

mm.. no se... creo q hacemos del amor algo tan complicado, cuando en realidad es lo mas simple del mundo, esta en la naturaleza del ser humano... quizas si dejaramos de cuestionar tanto podria manifestarse en todo su esplendor...