Un estudiante le dijo a Allan Bloom que una persona tenía que ser neurótica para crear. Él le preguntó por qué. "¿Porque otra razón iba a crear?, le respondió.
Por gusto, por eternidad... aun me quedan muchas posibilidades. Ese libro se llama Amor y Amistad, y lejos de ser un libro cursi sobre esos tópicos, es un consciensudo análisis sobre cómo se ha perdido el sentido del eros, del amor y de lo esencial que eso significa, poniéndo en su lugar el sexo y las "relaciones", como la forma más pura de relacionarse entre los hombres.
La consigna es simple: no debemos negar la capacidad de enamorarnos, de maravillarnos con la belleza de alguien, de "caer rendidos", de ero-tizarnos, de ser más vulnerables si se quiere, porque eso será parte de nustro sentido en la vida. El amor es algo existencial.
El sexo no es como comer, porque está, en pocas palabras, involucrado con el amor, la voluntad y la imaginación de los hombrecillos.
En eso estaba mientras pensaba en que uno de los jóvenes que conocí me invitó a leer "Partículas elementales", donde la oposición entre la abstinencia y la libertad parecía ser el tema de fondo. Pero no hay amor en ninguna parte.... ¿Realmente no hay amor en inguna parte? ¿Tú no tienes amor en ninguna parte? No disociemos por favor.
Mi recién adquirido gato, mientras, duerme como nadie. Yo dormito un poco bajo el sol, pero quisiera estar corriendo en medio de los árboles. Con sentimientos como la "felicidad intacta", es como si volviese a creer que van a atravesarme con una espada y no van a matarme. Es una forma de decir claro porque de que me matan me matan. Claro que a estas alturas siempre está la posibilidad de elegir porqué... o por quién.
Como sea, falta tan poco para que se acabe este año que me veo tentado a frases un poco trascendentales para que ojalá no todo sólo dependa del punto de viste desde donde se mira.
Ojalá no me olvide nunca de que el amor nos acerca a la eternidad. Y si eso para algunos es estar corrupto, lo estoy.
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